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Tres proyectos de arqueología destinados a Marruecos, rechazados en España

08/02/2013 Un total de tres proyectos arqueológicos destinados a Marruecos dentro de los progranas destinados al exterior han sido rechazados por el Ministerio de Hacienda del Gobierno español.

En concreto son, el referido a la zona de Tamuda, en Tetuán con un importe de 18.000 euros y que fue presentado por la Universidad de Huelva; otro que implicaba actuaciones arqueológicas en el valle de Oukalmeden, en el Alto Atlas, a cargo de la Universidad Complutense de Madrid y con un presupuesto de 8.000 euros y finalmente, el más ambicioso que presentaba la Universidad de Castilla La Mancha, en la cuenca del Oued Nun, en la zona del Souss-Tekna, con un importe de 24.000 euros y que abarcaba investigaciones arqueológicas en una zona presahariana de 7.000 kilometros cuadrados.

El director del proyecto Tamuda, cerca de Tetuán, y catedrático de Arqueología, Juan M. Campos envió un escrito al director de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Cultura, Jesús Prieto, en el que entre otras cosas le advierte: "un parón en el programa aunque sea provisional, resulta tremendamente pernicioso pues a veces las relaciones bilaterales y el ritmo de los trabajos y de las relaciones no son del todo fáciles de recuperar".

Según informó el diario El País, el Ministerio de Hacienda español denegó estas subvenciones -en total 30 de universidades de toda España- que la Secretaría de Estado de Cultura había subvencionado para proyectos de arqueología internacional. El argumento esgrimido desde Hacienda es que pertenecen a comunidades autónomas que incumplen sus objetivos de déficit público.

En la convocatoria de 2012 Cultura, tras evaluar las 64 solicitudes, había aprobado subvenciones a 45 proyectos, impulsados por universidades, instituciones sin ánimo de lucro y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) con un importe total de 730.000 euros y que fueron aprobadas provisionalmente.

Finalmente, fueron rechazados desde Hacienda 30 quedando sólo 15 presentados, de ellos diez enviados desde el CSIC  y universidades y cinco desde organismos sin ánimo de lucro con un importe global de 235.000 euros.

La decisión gubernamental ha provocado las protestas de la comunidad universitaria y de los investigadores inmersos en estos proyectos, algunos de los cuales habían sido premiados y reconocidos internacionalmente.