El Rey de Marruecos Mohammed VI, presidente de la comisión islámica Al Qods (Jerusalén en árabe), dirigió un mensaje a la comunidad internacional para que interceda ante el Gobierno israelí a fin de parar definitivamente la ejecución de "las medidas israelíes" respecto de los habitantes 'makdesi' de Jerusalén, que residen en el barrio Al-Bustan, en el suburbio Silwan, lindando las paredes de la santa mezquita de Al Qods.
Según la agencia de noticias oficial MAP, los mensajes se dirigen a Barack Obama, presidente de Estados Unidos; Nicolas Sarkozy, presidente de la República Francesa; Dmitri Medvedev, presidente de la Federación Rusa; Hu Jintao, presidente de la República Popular de China; Gordon Brown, primer ministro británico; Ban Ki- Moon, secretario general de la ONU, así como al Papa Benedicto XVI y a Mirek Topolanek, primer ministro checo, cuyo país asume la presidencia de turno de la Unión Europea.
En estos mensajes, Mohamed VI denuncia, en su calidad de Rey de Marruecos y presidente de la comisión Al Qods, resultante de la Organización de la Conferencia islámica, "este comportamiento que no se basa en ningún fundamento jurídico y que es contrario a las disposiciones del derecho internacional y los acuerdos firmados entre Israel y la Autoridad nacional palestina".
"Así como le había afirmado en varias ocasiones, las autoridades de ocupación deben preservar el sello particular de esta ciudad santa, proteger sus monumentos espirituales que simbolizan la coexistencia de los adeptos de las religiones monoteístas celestiales, y anular, además, todos los planes destinados a modificar su estructura demográfica y arquitectónica", destaca el Soberano.
"Habida cuenta del hecho de que estas medidas alteran seriamente la adaptación urbanística árabe en Jerusalén y atentan contra la paz y la estabilidad de decenas de familias palestinas y sus niños expuestos a los riesgos de expatriación forzada, llamo a su excelencia a interceder ante el gobierno israelí a fin de parar definitivamente la ejecución de este plan inaceptable", añade el Rey Mohamed VI.
El monarca destaca que "el Reino de Marruecos, que tiene una fe inquebrantable y absoluta en la opción de la paz, está seguro que la imposición del hecho consumado por la fuerza no puede conducir sino a la exacerbación de las tensiones, incriminaciones y violencias, dado que la región atraviesa una coyuntura agitada y complicada, marcada por la situación humana dolorosa en la Franja de Gaza".
Mohamed VI habla en su mensaje de la necesidad de "una solución justa y global, permitiendo la instauración de un Estado palestino independiente, viviendo junto con el Estado de Israel, en un clima de paz, seguridad y concordia, una solución duradera que reserva un lugar central a las cuestiones relativas al estatuto final, y en particular, al destino de Al Qods".
Por otra parte, el Gobierno marroquí ha decidido, por instrucciones de Mohammed VI, contribuir con 15 millones de dólares en la reconstrucción de la Franja de Gaza, anunció el ministro de Exteriores y de Cooperación, Taib Fassi Fihri.
En una alocución ante la Conferencia internacional para la reconstrucción de la Franja de Gaza, celebrada ayer lunes en Charm El Cheikh (Egipto) con la participación de 70 países, Fassi Fihri precisó que este importe se reparte entre 4 millones de dólares, producto del fondo de las donaciones, 3 millones de dólares procedentes de la agencia Bayt Mal Al Qods (Fondo de Jerusalén) y 8 millones de dólares ingresados por el Estado marroquí.
El ministro recordó que el Reino había establecido un puente aéreo que permitió la organización de 22 vuelos entre Marruecos y la ciudad egipcia de El Arich, la evacuación a Marruecos de heridos palestinos y el envío a la Franja de cientos de toneladas de ayudas médicas y alimenticias. Marruecos envió también a Gaza equipos médicos pluridisciplinarios.