El Rey Mohammed VI presidió ayer lunes en el palacio Marshane de Tánger, el acto de la firma del nuevo contrato entre el Estado y la Oficina Nacional de Ferrocarriles (ONCF) para el periodo 2010-2015, y del convenio con el Fondo Hassan II para el desarrollo económico y social relativo a la financiación del proyecto del Tren de Alta Velocidad (TAV) entre Tánger y Casablanca.

Mediante este convenio la ONCF se compromete, además de a mejorar la seguridad y de la calidad del servicio, a realizar un importante programa de inversión de 33 mil millones de dirhams (unos 2,93 mil millones de euros) cuyos dos componentes mayores son el proyecto de Tren de Alta Velocidad entre Tánger y Casablanca y la continuación de la modernización de la red actual. 

El TAV Tánger-Casablanca reducirá la duración del recorrido de 4.45 horas a 2.10 horas, y entre Rabat y Tánger de 3.55 horas a 1.20.

El nuevo contrato-programa se enmarca en el programa de acción del Gobierno que pretende el desarrollo económico y social del país, particularmente mediante el refuerzo y la modernización de las grandes redes de infraestructuras.

Este contrato fija para el período considerado los objetivos que debe alcanzar la ONCF, el programa de inversión que tiene que desarrollar la Oficina y sus modalidades de financiamiento, así como los compromisos del Estado y su apoyo a la puesta en marcha del plan de desarrollo de la Oficina.

El primer convenio, que constituye el contrato-programa entre el Estado y la ONCF, fue firmado por el ministro de Economía y Finanzas, Slaheddine Mezouar; el ministro de Equipamiento y Transporte, Karim Ghellab, y el director general de la ONCF, Mohamed Rabie Lakhlie.

En cuanto al segundo convenio relativo a la realización del proyecto de Tren de Alta Velocidad (TAV) entre Tánger y Casablanca, fue firmado por Salaheddine Mezouar, Karim Ghellab y por Abdelwahed Kebbaj, presidente del Directorio de Fondos Hassan II para el Desarrollo Económico y Social, y Mohamed Rabie Lakhlie.

Con este motivo, Ghellab presentó ante el Rey las grandes líneas del contrato-programa entre el Estado y la ONCF 2010-2015, así como el proyecto del TAV que une las ciudades de Tánger-Casablanca.

El programa tiene como principal prioridad situar al ciudadano en el centro de la estrategia del desarrollo, a través de la mejora de los servicios prestados en este dominio, explicó Ghellab.

En virtud de este contrato, precisó el ministro, la ONCF se compromete a realizar una inversión total de 33 mil millones de dirhams, de los cuales 20 mil millones serán dedicados al proyecto de la línea de TAV Tánger-Casablanca, los otros 13 mil millones se destinarán a la realización de un programa de modernización y mejoramiento de la red ferroviaria actual, agregó.


Mejora de las líneas Kenitra-Casablanca, Fez-Oujda y Settat-Marrakech

Se trata, particularmente, de mejorar las líneas Kenitra-Casablanca triplicando las vías, electrificar la línea Fez-Oujda, mejorar la línea Settat-Marrakech, continuar la modernización de las estaciones, establecer estaciones logísticas y adquirir y reforzar el material rodante.

Ghellab indicó que el plan director de los enlaces TAV prevé la realización de una red ferroviaria de 1.500 Km de longitud en el horizonte de 2035.

La aplicación de este plan permitirá el transporte de 133 millones de viajeros en vez de 53 millones, sin contar el TAV, la reducción del tiempo de recorrido, el reforzamiento de la seguridad de la circulación y la promoción de la dinámica del desarrollo sostenible en materia de protección de medioambiente y de lucha contra el cambio climático.

Evocando el calendario previsto para el proyecto, Ghellab subrayó que las obras arrancarán en junio y finalizarán a finales del año 2014, mientras que el inicio de la explotación está previsto para diciembre del 2015.

El acto fue celebrado en presencia del Primer ministro, Abbas El Fassi, y de los consejeros de SM el Rey, Abdelaziz meziane Belfkih, Mohamed Mouatassim y Zoulikha Nasri.