Los padres de los alumnos marroquíes que prosiguen sus estudios en el Instituto español Severo Ochoa y el colegio Ramón y Cajal de Tánger han celebrado el pasado jueves 14 de junio, una rueda de prensa, pidiendo a las autoridades educativas marroquíes la revisión del sistema de homologación y convalidación del bachillerato español con el sistema educativo universitario marroquí.
Una petición que refleja la preocupación se estos padres por el futuro incierto de sus hijos debido a los recortes que el Gobierno español que preside Mariano Rajoy ha hecho en Educación con la consecuencia de que los estudiantes universitarios no comunitarios tendrían que pagar el 100% del coste de la matrícula, esto es, dependiendo de la Universidad entre unos 2.000 y 6000 euros más. Este aumento provocará que muchos padres no puedan enviar a sus hijos a estudiar a España.
En este acto los padres han manifestado también que el sistema de homologación marroquí de diplomas no es claro respecto al bachillerato español a diferencia del bachillerato francés que sus alumnos no se ven en esta incómoda situación y sí son homologados.
Hay que recordar que estos padres se habían sumado a la huelga estatal educativa celebrada en toda España organizada el pasado 22 de mayo, pidiendo al Gobierno español que rectifique en su decisión de subir la matrícula en las universidades españolas para los estudiantes marroquíes y extracomunitarios. Una manifestación que fue organizada enfrente del Instituto español Severo Ochoa y el Colegio español Ramón y Cajal de Tánger (ver foto).
Marruecos es el país extranjero en el que España tiene una mayor presencia educativa: once centros docentes con un total de cinco mil alumnos. Del total del alumnado el 81% es de nacionalidad marroquí, un 16 % son españoles y el 3 % restante de distintas nacionalidades.