Un seminario celebrado en Tánger bajo el lema ‘Cómo hacer realidad la visión de emergencia de los países africanos en el horizonte de 2025’ debatió el surgimiento de las economías africanas.

Los expertos y los administradores africanos discutieron desde el lunes 24 en Tánger como materializar la visión de desarrollo de los países africanos que aspiran a unirse a las filas de los países emergentes en 2025.

Organizado por el Centro Africano de Investigación y Formación en Administración para el Desarrollo (Cafrad), este evento reúne a los líderes incluidos los coordinadores nacionales y visiones de la aparición de 17 países africanos.

El objetivo principal de este seminario, organizado en colaboración con la Fundación Hanns-Seidel y  que continuó hasta el miércoles, es apoyar los esfuerzos de los gobiernos africanos en la formulación y aplicación de las visiones de desarrollo para alcanzar el estado economías emergentes en 2025, en particular mediante el intercambio de experiencias y conocimientos sobre la aplicación de las visiones de desarrollo económico y social.

En este sentido, el director general de Cafrad, Simon Mamosi Lelo indicó que el acceso a la condición de los países emergentes es desde hace mucho tiempo, uno de los objetivos declarados de muchos países africanos, pero muchos de ellos no pudieron lograr esta aspiración debido a la ausencia de una estrategia integral de desarrollo o falta de recursos.

Es necesario que un país pueda elaborar unos objetivos claros y desarrollar una estrategia realista en este sentido, señaló, y agregó que la emergencia económica no debe ser utilizada como un eslogan político, sino ser llevada a la práctica por un proceso de desarrollo, incluyendo transformaciones y reformas que se introducirán en los ámbitos económico, político y social.

Por su parte, el ministro asesor presidencial senegalés y presidente del Instituto de Emergencia en Dakar, Mubarak Lo, señaló que el concepto de países emergentes no es tan claro como la de los mercados emergentes, explicando que la desarrollo de un país depende no sólo el crecimiento económico sino también el nivel de transformación que trajo crecimiento en la calidad de vida y las estructuras socio-económicas y políticas en general.

No hay recetas milagrosas para el ascenso económico de éxito, dijo, y agregó que los países que han tenido éxito en su desarrollo económico y social se han centrado tanto en la productividad, la redistribución de la riqueza, controlar el crecimiento de la población y la garantía de un mínimo de democracia y respeto de los derechos humanos, necesarios para atraer inversiones.

Entre los principales temas que se tratarán en estos talleres incluyen la preparación de las visiones nacionales de desarrollo, la implementación de proyectos y programas de reforma y modernización en relación con la realización de la visión y el fortalecimiento del liderazgo, centrado en la identificación de la capacidad y la movilización de recursos.