Salma El Azrak

La bebé subsahariana que fue bautizada en España como Princesa, su verdadera identidad se hizo pública tras pocos días de su estancia en España. Se llama Fátima y es de origen nigeriano. Sus padres subsaharianos que actualmente están afincados en Marruecos, un país transitorio para ellos, la reclaman, mientras ella descansa tranquilamente en un hogar de acogida en Sevilla. 

Por ahora, no se sabe como será el destino de Fátima o Princesa tal como todo el mundo la conoció al principio. 

Por una parte, sus padres la reclaman, por otra, se ignora cuál sería la reacción de las autoridades españolas, o sea, la junta, la fiscalía y el gobierno central que se encuentran en proceso de estudiar este caso, que tendrán que optar una de dos alternativas:

repatriar a  la bebé  o traer también a sus padres para que vivan felices en la ‘tierra prometida’. En caso de que la repatriasen, ¿intervendrían asociaciones y ONGs de Derechos Humanos para revocar esta decisión? dado que el paradero de la familia de Fátima, incluido ella, en un principio no ha de ser Marruecos, sino España. Es cierto que para la mayoría de los subsaharianos, permanecer en Marruecos, obstaculiza su lucha hacia un porvenir mejor, siempre fuera de tierras africanas, sin importar si es  norte , sur, este u oeste, no importa, lo que sí importa es cruzar el pequeño charco de 14,4 kilómetros de agua. 

No obstante, y según algunos medios españoles, el hecho de traer a los padres de Fátima, podría representar un problema:  “el efecto llamada”. Lo cual originará una nueva vía o solución -en este caso- para los miles de subsaharianos que están ‘paralizados’ en Marruecos. Generando a su vez una tendencia que consistirá en el uso de bebés para alcanzar el paraíso europeo, desafiar a ambos estados, evitar posibles repatriaciones y gozar del amparo de asociaciones humanitarias.

Lo que más se busca en el caso este, es el interés superior de la menor, que obviamente consiste en estar en el seno de su familia. Pero sin la niña depende de un interés más superior: el bienestar de la familia, que irónicamente para la familia se halla en España, que a su vez, podría repatriar a la niña.

Y queda la pregunta, ¿ qué será de Fátima? en otras palabras, ¿ que será de la familia de Fátima?