Texto y foto: Ferdaous Emorotene-Tánger.

“Aún nos falta algún tipo de acuerdo con alguna institución capaz de gestionar el teatro y sostenerlo económicamente a lo largo del tiempo”, subraya el cónsul de España en Tánger, Arturo Reig Tapia, en respuesta a una pregunta sobre el obstáculo para la rehabilitación del Teatro Cervantes de Tánger.

El diplomático español señaló a DiarioCalledeAgua : “Reflexionando sobre lo que podría ser ese futuro del Teatro Cervantes, habría que pensar quién puede gestionarlo y quién podría aportar todos los años la cantidad de dinero necesaria para que fuera sostenible en el tiempo”, agregando que “no es cuestión solo de creer que con el precio que pagasen los asistentes para asistir a los espectáculos, se podría mantener un edificio tan grande y con tantas problemas estructurales”, explica Reig Tapia.

El teatro Cervantes cerró sus puertas porque no había manera de hacerlo rentable, no había actividad artística suficiente como para mantenerlo con el precio de las entradas, las subvenciones para mantenerlo eran muy altas, apunta el cónsul.

Según el cónsul, en 2008 el Gobierno español hizo una propuesta a su homólogo marroquí para intentar creer una fundación hispano marroquí ya que el teatro es un bien del estado español en tierra de Marruecos.

“Dicha fundación podría trabajar en la reconstitución del Teatro y su refundación como teatro cultural polivalente”, subraya el diplomático añadiendo que “si algún día se rehabilita el Teatro, no podría ser para volver 100 años atrás, porque en un siglo ha cambiado la sociedad, el mundo, la concepción del espectáculo y las actividades culturales”.

Hay que recordar que a principios del pasado mes de febrero, el cónsul y el alcalde de Tánger, Fouad El Omari, se reunieron para estudiar el proyecto de la restauración y la rehabilitación y para estudiar el coste de este proyecto tan esperado por los ciudadanos tangerinos.

Construido en 1913, el Teatro Cervantes cumple este año su Centenario. Es uno de los más bellos e importantes sitios emblemáticos de Tánger, actualmente y desde hace muchos años está cerrado y abandonado. Su estructura está seriamente dañada aunque permanece en pie al ser de hormigón armado.