Salma El Azrak
Durante un coloquio bajo título de ‘La primavera árabe en el Mediterráneo: Tiempos de cambios’ organizado por la Fundación Tres Culturas en Sevilla el martes, entre el 11 y y 12 de febrero, el consejero del rey Mohamed VI y presidente de la Fundación Tres Culturas (FTC), André Azoulay ha señalado que “Marruecos es el único país de la región que consagró en 1962 los principios del pluripartidsmo y de la libertad de expresión”.
El diplomático marroquí subrayó que Marruecos recorrió largos trayectos para asimilarse a los países occidentales en cuanto a su política, por una parte, en materia económica, Marruecos adoptó la economía del mercado en vez de la economía planificada, en materia social, el país abogó por la igualdad de género y la mejora de la situación de la mujer, mientras que en materia educativa y cultural, el país reconoció la oficialidad de la lengua amazigh, recalcando que el país optó por unas reformas que hicieron de él ser un país pionero en materia de derechos humanos en comparación con los demás países de la región, gracias a varias reformas que la Constitución marroquí adopté.
Por otro lado, Azoulay lamentó el desinterés y descuido que recibe el status quo político, social y económico de Marruecos por parte de los medios de comunicación internacionales.
Azoulay compartió la mesa con el consejero de la Presidencia, Manuel Jiménez Barrios y el ex presidente de la Junta de Andalucía, Rafael Escuredo.
Cabe señalar que estas jornadas conocerán la intervención de importantes nombres en el área político internacional, como es el caso del Alto Representante del Consejo para la Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea, Javier Solana.
Estas jornadas han sido organizadas en colaboración con el Ministerio de los Marroquíes Residentes en el Extranjero y Asuntos de Inmigración, la Cátedra Rafael Escuerdo, la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) y el Real Instituto Elcano, para debatir los cambios revolucionarios que experimentaron los países árabes y especialmente los países del norte de áfrica, así como los resultados de los mismos, a partir de un análisis diagnóstico de la realidad política, económica y social, siempre partiendo de un esquema de democratización para llegar a óptimas propuestas de convivencia intercultural, interreligiosa y sobre todo inter-género.