Texto Y foto: Safia Abahaj- Tánger

El jueves 5 de junio de 2014, se llevó a cabo un emotivo y entrañable acto, el más esperado por los estudiantes de segundo de bachillerato del Instituto Español Severo Ochoa de Tánger, un acto al cual asistieron los profesores del centro, el señor cónsul de España en Tánger, Arturo Reig Tapia, así como los padres y los seres más queridos de los jóvenes estudiantes.

El acto de graduación empezó puntualmente en la hora a la cual estaba prevista (19h), en el salón de actos del centro, comenzando con la intervención del director del Instituto, Bernardino Cerviño Castro, el cual rindió homenaje tanto a los alumnos como a sus padres, seguidamente intervino el Cónsul General de España en Tánger, el cual felicitó a los jóvenes por su esfuerzo y les deseó suerte su etapa universitaria. En el mismo sentido, el señor Cónsul General acabó su intervención afirmando ‘buena salud,  buen humor y que la vida os bendiga en  esta nueva generación de estudiantes que empiezan una nueva etapa en sus vidas’.

Tras la intervención del Cónsul General de España, se proyectó un divertido y corto video en el cual los estudiantes parodian a sus propios profesores. Seguidamente, y en representación a los profesores del centro, intervino el profesor Luis Fernández, en primer le agradeció a sus alumnos por elegirle para representar al profesorado del centro en este especial acto de graduación.

Asimismo, el profesor afirmó: ‘tengo muchas similitudes con los estudiantes de segundo de bachillerato de la promoción 2008-2014, y es que llegamos juntos al instituto y juntos nos vamos, vosotros empezaréis vuestra etapa universitaria en España, para mí supone el fin de mi etapa en extranjería y vuelvo de nuevo a mi Andalucía’.

Durante el discurso del profesor Fernández hizo varias bromas así como contó varias de sus anécdotas durante su estancia en el Instituto Severo Ochoa de Tánger, seis años que recuerda con mucho cariño afecto que incluyen tanto buenos y malos momentos aunque la balanza se incline hacia  una experiencia positiva que se llevará para siempre como recuerdo de su paso por uno de los mejores centros docentes españoles existente en Marruecos.

Seguida a la intervención del profesor Fernández, se proyectó un segundo video en el que los presentes pudieron ver tres minutos en cual se plasmó la trayectoria de los estudiantes desde su ingreso en el Colegio Español Ramón y Cajal hasta llegar a su paso por el Instituto Severo Ochoa de Tánger, una colección de fotos así como de vídeos cortos que marcaron cada momento de sus vidas desde su infancia hasta su etapa de adolescencia.

Después de la proyección del emotivo video, el alumno Mohamed El Bouacheri en representación de sus compañeros dio un breve e informal discurso en el cual hizo una especial mención a sus seres más queridos y en especial a todos los padres de los alumnos, así como hizo un recorrido a través del tiempo recordando con mucha nostalgia los seis inolvidables años que pasó junto con sus compañeros en el Instituto Severo Ochoa de Tánger.

Finalmente, los tutores de los estudiantes les hicieron entrega de un obsequio del centro y se pudieron fotografiar con sus profesores así como con sus padres, familiares y amigos que les acompañaban en uno de sus días más especiales.

‘Tras un largo camino, y tras pasar tantos años juntos en el colegio español, este día es muy especial para mis alumnos’, afirma el profesor de francés, Antonio Amado. ‘Espero que todos aprueben la selectividad y puedan acceder a las carreras que desean’ añade el profesor Amado. Por su parte, el director del centro Bernardino Cerviño Castro, afirmó: ‘se trata de alumnos que llevan seis años en este centro y por tanto, este acto para ellos es entrañable y muy emotivo’.

Asimismo, añade: ‘espero que se lleven muy buen recuerdo de todo, aquí han vivido buenos y malos momentos, risas, lloros han aprendido muchísimo, espero que les hayamos transmitido seguridad en sí mismos, que nunca se rindan y luchen por sus sueños’. En el mismo sentido, destaca que la mayoría de estos alumnos se irán a estudiar en España, motivo por el cual los profesores nos sentimos muy satisfechos, por ese vínculo que ya tiene España y Marruecos por la buena vecindad.