Safia Abahaj
La madrugada del pasado viernes 11 de julio de 2014 , tres edificios se derrumbaron en Casablanca, dejando numerosas pérdidas humanas bajo los escombros. La operación de búsqueda continua hasta el momento aunque cada vez existen menos posibilidades de salvar más personas vivas.
Según el diario Al Akhbar, el derrumbe de los tres edificios ha ocasionado la muerte de un total de 23 personas. El número de víctimas, sin embargo, se espera que crezca ya que los bomberos continúan con la tarea de rescate personas que están aún bajo los escombros.
Una testigo presencial, Salwa vecina del barrio, afirmó que la “gente estaba tratando de buscar a sus familia y amigos pero la policía no les dejó”. “Ha sido una lucha contra el tiempo, pero supongo que la policía se dio cuenta de que era demasiado tarde (…) asimismo, me quedé chocada al ver ladrones rondando la zona por si podían robar algo entre los escombros”.
El barrio Bourgogne de Casablanca ha experimentado su peor tragedia. La pérdida de personas inocentes causó un momento de dolor en todo Marruecos. Por otra parte, muchos ciudadanos están indignados por la forma en la cual los bomberos llevaron a cabo la operación de rescate de las víctimas.
Otro testigo, Jaafar vecino también del barrio y conocido de la actriz Amal Maarouf, declaró: “estoy profundamente decepcionado por la forma en que las autoridades marroquíes hacen frente a este tipo de situaciones. Había muchos policías pero de nada sirvió su presencia”. “Ellos no tienen un equipo ni conocimientos necesarios para hacer frente a este tipo de situaciones. Me pregunto qué harían si un día Marruecos sufre una catástrofe natural como podría ser un terremoto”. “¡Dios no lo quiera!” afirma el testigo.
Por otra parte, cabe mencionar que Casablanca tiene muchos edificios cuya estructura y seguridad no están ni reformados ni actualizados. La mayoría de los propietarios sólo se preocupan de hacer más dinero y tienen poco respeto por la seguridad de las personas. Por ello, estos trágicos incidentes son más probables que ocurran en cualquier momento, ya que muchos edificios son muy antiguos y pueden convertirse en peligrosas trampas para los ciudadanos marroquíes inocentes.
Las autoridades marroquíes se han comprometido a reforzar el control e inspección de edificios antiguos con el fin de intervenir ante posibles horribles incidentes tales como el desastre de Bourgogne.