Texto y Foto: Najlaa Kounitrate
En este mes del Ramadán, la asociación ‘Dragón Tánger’ ilustra la antorcha de la solidaridad que se ha apoderado de nuestra juventud marroquí.
Este mes sagrado es propicio para las reuniones entre amigos, colegas durante o después del ftour. El sábado 19 de julio, los miembros de la asociación han elegido encontrarse alrededor de la comida de la ruptura del ayuno. El ftour se ha convertido en una ocasión para reunir los miembros a fin de intercambiar conocimientos y experiencias.
“Desde siempre este mes sagrado es una oportunidad para que los marroquíes modestos o ricos hagan prueba de generosidad, ofreciendo ‘ftoures’ a los vulnerables o compartiéndoles con sus amigos” afirma el presidente de la asociación, Salim Gharroudi.
Llevada a cabo por jóvenes marroquíes, esta acción similar a las iniciativas de los hoteles o de las familias numerosas, ha dejado sus huellas en este ‘Ftour Colectivo’ organizado por unos voluntarios que son capaces de innovar y combinar solidaridad con las prácticas modernas.
Casi cada día, más de 20 de voluntarios de entre 13 y 20 años se reúnen en la sede de la asociación para crear un ambiente agradable y ofrecer no sólo de la comida, sino también un ambiente cálido y familiar.
Jóvenes llenos de entusiasmo y dinamismo, dejan a sus familias para reunirse con sus amigos y compartir una mesa preparada por ellos mismos. Estos benévolos están apropiándose de un valor fundamental que es la solidaridad.
“Hoy en ‘Dragón Tánger’ hemos organizado un evento que reúne a los miembros de la asociación con el fin de compartir un momento de felicidad en este mes sagrado. Aparte del ftour colectivo, celebramos varias actividades como la promoción de la cultura de Manga y la cultura japonesa” explica Mohamed Chentouf, un benévolo.
El objetivo según todos ellos, es trasladar a la asociación la atmósfera del Ramadán que reina en las casas marroquíes y compartir momentos de alegría y felicidad con los jóvenes miembros.
“Este ‘iftar colectivo’ constituye una oportunidad para que los miembros de la asociación establezcan un contacto directo entre ellos organizando cursos y competiciones culturales y dar a conocer el Islam y sus valores de tolerancia y convivencia” concluye Salim.